24 de febrero de 2014

Relaciones digitales (relato breve)

Se quedó atrapado en los ojos negros de la alumna nueva. Necesitaba saber de ella. Verla, donde fuese. Sintió la alegría de estar vivo, la necesidad de mejorar. Los rostros de siempre volvían a ser niños con las cosas de los adultos. Las grietas de las paredes hacían divertidas muecas a los caminantes. Las tazas de café titubeaban, graciosas, y las colillas se enredaban risueñas en los ceniceros. El tipo odioso de la tele se había convertido en un tío entrañable. Y ella siempre estaba en su mente. Quería contarle lo que pasaba por su cabeza y saber cómo mataba el tiempo cuando no había nada que hacer. Sus miedos. La noche era ese espacio inmenso y secreto donde podía perderse de su mano. Acariciar su pelo, acurrucada a su lado. Besar su cuello y olvidarse de todo lo demás.

El sol le descubría siempre con una sonrisa y no sabía responderle si el sueño había sido o acababa de empezar. Hasta que ella puso más datos en su perfil. Tenía novio. Los otros datos no los sabremos nunca. Le habían roto el corazón, otra vez. Siempre me pasa lo mismo con los cursos online, dejó ver, enigmático, en su estado de facebook.

Es mi relato para el II Concurso de Relato Breve "El Dios Tecnología" del Club de Escritura Fuentetaja

8 comentarios:

  1. En cualquier caso la ilusión se despierta de la misma manera que en una relación de carne y hueso, y esos momentos de ilusión y de cavilaciones amorosas son tan especiales...
    Un abrazo Andoni

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    1. Sin duda, Sofya... lo que se desencadena es lo mismo. La era digital, o virtual, no cambia más que la manera de acercarnos... y es tan real o irreal que la "analógica". En lo que vemos siempre hay una necesidad, un prejuicio, siempre hay un "lo que queremos que sea", que ya es mucho filtro.

      Abrazo! :)

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  2. La era virtual nos hace más proclives a creer en cuentos de hadas, porque fantasear sin arriesgarnos nos crea una seudoilusión, que fabricamos y alimentamos nosotros mismos, pero nunca podrá ser como el cara a cara, ahí nos ponemos en riesgo, sufrimos o ganamos.

    Saludos

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    1. Sí, la era virtual hace más fácil aparentar lo que uno no es, y también disminuir el riesgo del cara a cara. Lo del cuento de hadas ya no lo tengo tan claro, porque creo que, en el fondo, es una necesidad del que mira. Uno, en el tema del amor, creo que acaba viendo lo que quiere ver...

      Saludos, Marinela :)

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  3. Curiosamente, el ¿amor? ¿atracción? virtual avanza mucho más rápido que en la realidad. Y digo curioso porque a pesar de existir kilómetros y pantallas, a veces la cercanía abruma.
    Cuántas cosas desconoceremos o creeremos saber, equivocados, que se esconden tras los perfiles...

    Un besote!

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    1. Es más fácil la proyección del que mira, y más difícil la comunicación porque no hay expresiones, gestos, tonos... Y si ya andamos carentes de vocabulario, olvídate! :D

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  4. Me ha gustado mucho tu forma de narrar y llevar al lector a un final inesperado.
    Felicidades por el trabajo bien hecho, tanto si ganas como si no el concurso al que lo has presentado.
    Me quedo en tu blog, si te parece bien.
    Un saludo

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  5. Muchas gracias, María José, por tus palabras :)

    Encantado de tu presencia aquí, y de tus comentarios.

    Besote,
    Andoni

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